miércoles, 12 de octubre de 2011

Indignados Peru contra la corrupcion



Diversos gremios sindicales y sociales marcharon el día 12 de Octubre en la ciudad de Lima en respaldo a las políticas de inclusión social y lucha contra la corrupción del gobierno del presidente peruano, Ollanta Humala.

La dirigencia de la Central General de Trabajadores del Perú (CGTP), uno de los gremios que impulsó esta manifestación cívica, reiteraron la necesidad de que el gobierno de Humala debe mejorar el salario mínimo y fortalecer la lucha contra la corrupción.

Una masa compacta de miles de personas, encabezados por el dirigente Mario Huamán, marcharon cívicamente por el centro de la capital peruana hasta arribar a la sede del Congreso, donde fueron recibidos por el presidente de esta institución.

"Esto es un respaldo, esto no es protesta", eran las consignas más escuchadas por las avenidas Nicolas de Pierola, Grau y Abancay, por donde se desplazaron los manifestantes portando llamativas banderolas con slogans y consignas.

El presidente del Congreso peruano, Daniel Abugattas, recibió a los dirigenteas gremiales y les prometió que las demandas de las organizaciones sociales y gremiales forman parte de la política del gobierno.

Abugattas reiteró que la lucha contra la corrupción es una "responsabilidad ineludible" del Congreso y de los poderes del Ejecutivo y Judicial, como parte de los órganos del Estado peruano.

El líder político del Congreso también aseguró que otra de las prioridades del gobierno peruano es lograr la inclusión social de los sectores populares menos favorecidos, pese al desarrollo económico logrado en los últimos años.

La marcha masiva, que se prolongó por varias horas y se tomó el centro de la capital peruana, también recibió el apoyo y las simpatías de la población en las calles.

Entre los diversos gremios sociales y sindicales que se hicieron presentes en esta manifestación se encontraban, la Central Unica de Trabajadores del Perú, los sindicatos de constucción civil, mineros, trabajadores azucareros, sindicato de trabajadores de los puertos y teléfonos, entre otras organizaciones.
Manifestantes exigían cambios en la Constitucion Politica

lunes, 10 de octubre de 2011

Indignados en Chile



Indignados en Chile
Los Indignados en Chile se movilizaran el próximo 15 de octubre, con marchas convocadas en Santiago y en otras ciudades del país para pedir una "democracia radical" y "por una educación gratuita y de calidad".
Unas ochenta organizaciones sociales han organizado esta jornada de protesta para el próximo sábado, cuando se cumplen cinco meses del movimiento 15-M, nacido en la madrileña Puerta del Sol una semana antes de las últimas elecciones municipales y autonómicas en España.
En Chile se anuncian manifestaciones en Santiago, Rancagua, Talca, Constitución, Concepción, Temuco, Chiloé, Osorno y Arica.
La decisión de celebrar estas marchas se tomó durante el primer encuentro nacional de Movimientos Ciudadanos del país, celebrado este sábado en Santiago, según informó hoy en un comunicado el Movimiento Ciudadano Democracia para Chile, constituido en agosto.
Sobre la mesa estuvieron el conflicto estudiantil que desde mediados de mayo sacude al país, así como las manifestaciones por el medio ambiente, las huelgas de trabajadores y los paros ciudadanos en Calama y en Punta Arenas para pedir más recursos al Estado central.

Indignados en Tunez



Los ciberataques colapsan todas las webs del régimen tunecino
Las protestas contra la dictadura provocan la mayor crisis en Túnez en 23 años.- La inmolación de un vendedor ambulante desató la revuelta

Hoy el Movimiento de Indignados llega hasta los Estados Unidos, Obama no sera re-elegido.


Todo empezó el 17 de diciembre cuando la policía volcó en la pequeña ciudad de Sidi Bouzid el carrito repleto de frutas y hortalizas de Mohamed Bouazizi, un licenciado en informática de 26 años en paro desde que acabó la carrera. Aunque es el país del pequeño Magreb con la renta per cápita más alta, en Túnez hay más de medio millón de parados, sobre un total de 10 millones de habitantes, muchos de ellos jóvenes diplomados.

Bouazizi se había convertido en vendedor ambulante para proporcionar unos ingresos a su familia, pero los agentes le castigaron porque carecía de la preceptiva licencia para dedicarse a ello. Desesperado, se inmoló ante la sede del Gobierno Civil -ha fallecido este miércoles en un hospital- y su gesto provocó una onda expansiva. Las protestas se desataron en gran parte del país, primero en pequeñas ciudades y después en la capital, donde miles de personas se concentraron ante la sede del sindicato único, la UGTT, que da la espalda a los manifestantes.

En la pequeña localidad de Mezel Bouzayane dos manifestantes heridos de bala el 24 de diciembre también fallecieron días después y a continuación otro joven se suicidó lanzándose contra unos cables de alta tensión al tiempo que gritaba contra el paro y la carestía de la vida. En total ha habido hasta ahora cuatro muertos, decenas de heridos, probablemente más de 100 detenidos y cuantiosos daños materiales en edificios públicos.

"El paro es la chispa"

"El paro es la chispa que ha provocado esta revuelta", explica en su blog Lina Ben Mhenni, de 27 años, "pero los manifestantes critican también al poder". "Los tunecinos están hartos de los 23 años de dictadura, corrupción y de la falta de libertad de expresión", añade. Las consignas coreadas espontáneamente empezaron por denunciar las injusticias sociales, pero se ampliaron rápidamente para abarcar a la corrupción de la familia presidencial sobre la que los cables del Departamento de Estado revelados por WikiLeaks aportan jugosos detalles.

En el entierro de Bouazizi unas 5.000 personas gritaban este miércoles en Sidi Bouzid "¡Vergüenza para el Gobierno!", al tiempo que prometían vengarse: "Hoy te lloramos, pero mañana haremos llorar a los que te han empujado el suicidio". Numerosos internautas y el Colegio de Abogados han convocado una huelga general para este jueves.

El presidente Ben Alí ha reaccionado mezclando gestos de compasión, promesas y amenazas. Visitó a Bouazazi en el hospital del Ben Arous en el que estuvo ingresado, anunció en televisión que dedicará en los próximos años 3.495 millones de euros a luchar contra el paro juvenil, destituyó a los ministros de Comunicación y Comercio, pero también arremetió contra las "instrumentalizaciones políticas" de las protestas.

Atacó además a Al Yazira, la televisión panárabe vía satélite, que se ha convertido en la principal fuente audiovisual de información de los tunecinos -los medios públicos ignoran la revuelta-, aunque es en Internet donde se libra buena parte de la batalla entre el régimen y sus detractores. Túnez es el país del área con mayor penetración de Internet, pero también donde la Red está más controlada.

Arde Internet

Los internautas tunecinos se las ingenian para sortear los controles y difundir vídeos de las manifestaciones o convocar el lunes en Thala, a través de Facebook, una huelga de estudiantes de bachillerato. Pidieron ayuda a Anonymous, los hackers que la emprendieron con las empresas e instituciones que perjudicaron a Julian Assange, y estos han respondido. "El pueblo de Túnez nos ha solicitado ayuda y se la hemos dado", asegura el colectivo de hackers. "Quién se habría imaginado la primera ciberguerra (entre un pueblo y su régimen) tendría lugar en Túnez", se pregunta la bloguera tunecina Sarah Ben Hamadi.

A principios de semana el conjunto de las webs de la presidencia, del Gobierno y de las instituciones públicas del país habían dejado de funcionar a causa de la ofensiva de Anonymous, aunque el portal tunecino Tunisie Numérique precisaba que algunas de esas páginas habían sido cerradas por sus gestores para evitar males mayores en caso de ataque de los piratas.

Anonymous colgó un texto en las webs atacadas en el que denuncia la "censura insultante" impuesta por Ben Alí en Internet. También criticaba a "la prensa libre y abierta" del mundo occidental cuya responsabilidad consiste "en dar cuenta de lo que los medios de comunicación tunecinos, sometidos a la censura, no pueden relatar".

Mapa de las protestas en Túnez del 17 de diciembre al 4 de enero . Fuente: Al Jazeera

Movimiento de Indignados Global